Todo tiene su tiempo...
y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora

miércoles, 28 de octubre de 2009

... dìas patagónicos

"Liberate! por un momento dejate llevar y permitite sentir un momento sin límites."
Permaneció en silencio por un momento, dubitativa.
Aventurarse a lo desconocido representaba una experiencia tentadora. Dejar atrás infinitos momentos; rcuerdos de una vida que se encuentra en el umbral del cambio.
"Liberate!...", volvió a escuchar; como una voz lejana.
El viento volvió a susurrarle aquellas palabras y la hoja, simplemente se soltó de su rama.

Pequeño rincón de cosas que leo y me sorprenden



Ella barrió el otoño del patio de mi casa
y casi a quemarropa se nos vino el verano.

De súbito, la escoba se llenó de ramas
y a sus manos, ya verdes, regresaron los pájaros.

Todo de golpe. Todo cruzó como una ráfaga.
Sucedió tan de pronto q no puedo acordarme
ni cómo se llamaba.

Barrió el otoño y luego
ella olvidó acordarse.
Creo q hemos pactado no acordarnos de nada.
Pero el otoño vuelve cada otoño
a mi casa, y acumula mil hojas
donde no escribo nada.

Ella no ha vuelto. Nunca voverá a su tarea
de barrer el otoño del patio de mi casa.
En adelante, el viento barrerá la nostalgia.

Lo que no entiendo es,
cómo me olvidé de olvidarla.

("Ronda para barrer el patio")
Armando Tejada Gómez