Todo tiene su tiempo...
y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora

viernes, 6 de julio de 2007

Buscando en mi interior

Recorría algunos rincones llenos de recuerdos.
No pude sino detenerme, observarlos.
Me invadió la nostalgia y la melancolía; los deseos de saber... varias sonrisas, muchos suspiros.
Esa curiosidad que a veces me fastidia... mi ansiedad... la impaciencia (o la bendita paciencia?)
Como sea, los días pasan y todo fuera de mi me indica que sucede con una rapidez casi imperceptible. Sin embargo, en mi interior, los momentos se apaciguan, aletargan... tengo esa sensación de estar parada en el mismo lugar que hace un año atrás, y que no avanzo; que me detengo, olvido, pienso, cuestiono, adormezco...
Aun así, aunque contradictorio, en algún rinconcito de mi interior está la cuota de optimismo que hoy no encuentro.
¿Serán las presiones?... mis propias presiones; mi autoexigencia, mis sueños, metas... no falta tanto en realidad, y éste puede que sólo se trate del primer paso.
Quién sabe, no?... sólo sigo buscando algunas respuestas. Sigo buscando en mi interior ese "no sé qué"

Pura melancolía... nada más.

(nos vemos a fines de julio)

martes, 3 de julio de 2007

Sólo 1 día

Días agitados… días de mucho laburo. Días corriendo de un lado a otro.Mil cosas para hacer. Las exigencias y horarios a cumplir cada día.
La casa y sus demandas; también el estudio… el ritmo universitario y todo lo que ello implica.

Si lo leo así, puede que todas las palabras anteriormente mencionadas describan
parte de mi vida últimamente.
Entonces, me preguntaba: ¿Qué es lo que más extraño?
Extraño salir a caminar.

Es algo q me gusta de vivir acá, o cuando recorro algunos lugares durante las vacaciones (la cordillera… impecable en el verano!)
Largas caminatas (preferentemente en los inicios del otoño y durante la primavera); aire fresco entre las alamedas del valle; tranquilidad…
Caminar que va de la mano con replantear situaciones y por qué ando corriendo tanto. O, lo que es mejor, no pensar en nada!
Caminar que implica un “parate” en la alocada vida que vamos llevando. Ritmo que se acelera, a veces demasiado, y cuando queremos darnos cuenta, andamos un poquito nerviosos (je!)

Extraño caminar x mi adorado “pueblucho”…o por la playa (sobretodo en esta época q se ven ballenas con crías… eso sí, mientras calienta el sol, porq sino chupás un friope q ni te cuento)
Esas caminatas significan: tiempo para mi… para estar solita, disfrutando tranquila, respirando segundo a segundo con mis sentidos completamente dispuestos a captar aquellos instantes.
No hablo de compañía… de extrañar tiempo con amigos o algún amor, sino de un tiempo a solas.

¿Lo pensaron?
No necesitan, de vez en cuando, un rato con uds. mismos? Sin el bullicio de la calle (ni hablar en las ciudades grandes, donde he visto como la mayoría está en la suya y caminan como si el tiempo se les terminara YA!), sin las presiones de llegar a horario a algún lugar, sin las demandas familiares…
Solitos!

1 día solo para uds.
¿Qué extrañan?.... ¡¿qué harían?!

Pequeño rincón de cosas que leo y me sorprenden



Ella barrió el otoño del patio de mi casa
y casi a quemarropa se nos vino el verano.

De súbito, la escoba se llenó de ramas
y a sus manos, ya verdes, regresaron los pájaros.

Todo de golpe. Todo cruzó como una ráfaga.
Sucedió tan de pronto q no puedo acordarme
ni cómo se llamaba.

Barrió el otoño y luego
ella olvidó acordarse.
Creo q hemos pactado no acordarnos de nada.
Pero el otoño vuelve cada otoño
a mi casa, y acumula mil hojas
donde no escribo nada.

Ella no ha vuelto. Nunca voverá a su tarea
de barrer el otoño del patio de mi casa.
En adelante, el viento barrerá la nostalgia.

Lo que no entiendo es,
cómo me olvidé de olvidarla.

("Ronda para barrer el patio")
Armando Tejada Gómez